Si, si. El whiskey se puede apreciar muy bien tomándolo solo, o solamente agregando uno o dos hielos. De esta manera podemos apreciar el real sabor de esta apasionante bebida espirituosa.
También conocido como WHISKEY SOBRE LAS ROCAS, consiste básicamente en una medida de whiskey con uno o dos hielos. Muchas personas lo beben con un chorro de agua o incluso de soda. Esto va a degustación de cada uno.
Hablaremos un poco de una de las bebidas destiladas más populares que suele estar presente en la mayoría de las grandes celebraciones. Como por ejemplo el día de San Patricio, así es, nos referimos al whiskey irlandés.
El whiskey irlandés o Irish Whiskey es uno de los primeros y más conocidos whiskies del mundo, principalmente porque este fue de las primeras creaciones que dió paso a la amplia variedad que disfrutamos hoy día. Suele ser confundió con el whisky escocés pero, al igual que los otros tipos se elaboran de forma y con ingredientes distintos.
Desde hace muchos años y hasta la actualidad el whiskey irlandés se prepara de la misma forma tradicional. Es decir, con el mismo proceso artesanal que logra un sabor más suave con el pasar de los años. Si tú eres uno de los fanáticos del whiskey irlandés y quieres saber un poco más de él, solo continúa leyendo que nosotros te lo contaremos todo.
Cuando se trata de la historia del whiskey podemos meternos en problemas dependiendo de con quién hablemos. Pues, el origen en sí no está muy bien definido pero sí bastante reñido entre los irlandeses y los escoceses. Según las historias de cada uno podrían decir que ellos son los creadores de esta bebida tan querida. Aunque, si nos dejamos llevar por una de las teorías más conocidas Irlanda dio el primer pasó de la creación.
Según relata la historia, dicho paso se dio aproximadamente en el año 1400, luego que la gran mayoría de los monjes se trasladarán a Irlanda por la cantidad de problemas religiosos que vivía el resto de Europa. A partir de su llegada, Irlanda comenzó la práctica del catolicismo y como los monjes acostumbraban a destilar perfumes también se inició la destilación de la cerveza. Sin embargo la creación del whiskey irlandés en sí, fue una mezcla que hicieron los irlandeses cuando decidieron destilar la bebida que acostumbraban a tomar los monjes.
Después de este proceso se especula la distribución del whiskey irlandés en Escocia, donde sufrió algunos cambios y se creó la versión del whisky escocés. No obstante, si le preguntamos la historia a algún nativo de Escocia seguro nos contará la historia al revés.
De igual forma la historia del whiskey irlandés no acaba allí, esta bebida es de tanta importancia que tuvo incidencia en muchas otras ocasiones. Recién empezaba a salir el whiskey lo utilizaron muchísimo como un complemento medicinal, ya que este lograba eliminar de forma natural las bacterias alojadas en el cuerpo. Por lo que se le llamó Uisce Beatha en irlandés, es decir agua de vida.
Incluso fue utilizado por uno de los grandes personajes históricos de Irlanda, el rey de Inglaterra Enrique II, quién lo tomaba para aumentar su espíritu durante las peleas. El whiskey irlandés obtuvo una gran popularidad a mediados del siglo XIX, convirtiéndose en el whiskey más tomado en el mundo. Pero, la situación cambió en el siglo XX cuando Inglaterra impuso una gran cantidad de impuestos por su exportación y Estados Unidos decidió regularizar la entrada del mismo.
Con esto la producción bajó muchísimo y los fabricantes se vieron fuertemente afectados. No fue sino hasta hace poco cuando la producción del whiskey irlandés volvió a aumentar entre un 25% y 30%, volviendo al mercado como uno de los mejores que siempre ha existido.
Como indicamos anteriormente, el whiskey irlandés se elabora de la misma forma desde hace muchos años, por lo que esta es una parte muy importante para cualquier irlandés amante del whiskey. El mismo se fabrica única y exclusivamente con tres ingredientes previamente seleccionados, entre ellos el agua, la cebada malteada y la cebada sin maltear. Las dos últimas comúnmente cosechadas en las propias tierras de Irlanda para mantener la tradición.
El primer paso de la elaboración es preparar la mezcla inicial de los tipos de cebada según su procedencia, la cual depende de cada fabricante y es la encargada de realzar el sabor. Luego, el paso siguiente es el malteado, en él, la cebada se limpia y comienza a germinar con agua a altas temperaturas. Este paso será el encargado de hacer crecer cada grano de cebada, sin embargo, como puede llegar a germinarse demás luego de cierto tiempo se introducen en un horno para secarlos.
Cuando la cebada logra secarse empieza el trabajo del molino, para después mezclar con abundante agua e iniciar la tanda de fermentación que acaba en aproximadamente 3 días. El líquido obtenido debe destilarse, y como se trata de un whiskey irlandés se destila 3 veces o como mínimo 2. Se le agrega la cantidad de agua necesaria para que el líquido almacene entre 40 y 50 % de alcohol e inicia el característico almacenamiento de los este tipo de bebida, en este caso de 6 a 7 años, para su añejamiento en barricas, especialmente de roble.
El whiskey irlandés fue durante algunos años el whiskey más vendido en todo el mundo, así que entre las marcas disponibles hay bastante variedad. Pero, como todo algunas son mejores que otras y esas se han ganado el corazón de los fanáticos del whiskey irlandés. Entre las marcas más reconocidas encontramos a las más pioneras, es decir:
Algunos en la actualidad evitan consumir licores fuertes como el whisky, debido al característico y potente sabor que tienen la mayoría de ellos. Pues, por lo general, encontramos whiskies o muy dulces o muy amargos que solo logran soportar los grandes fanáticos.
Sin embargo, existe un tipo de whisky muchísimo más adaptable a todos los tipos de paladar. Que, además, no sobrecarga de sabor a ninguno y suele conseguirse a buen precio. Es decir, el whiskey blend, una mezcla entre el whisky 100 % de malta, que suele presentarse en mayor cantidad brindando gran parte del sabor y el whisky de otro tipo de granos, con un sabor más suave en menor cantidad.
Las cantidades exactas de esta mezcla dependen únicamente del fabricante y aunque no lo parezca, es más popular de lo que muchos creen. Algo tan simple como que el paladar aprecie con más suavidad el sabor, hace que hasta los grandes catadores agradezcan al creador. Pero, ¿conoces con exactitud el origen y elaboración del whisky blend? Si la respuesta es negativa, sigue leyendo el post para conocerlos.
El whisky blend es originario de Escocia donde, además de producir ambos whiskies necesarios para la mezcla final, hay muchas destilerías innovadoras. Entre una de ellas la creadora del whiskey blend, que en el siglo XIX solo buscaba un producto apto para más clientes tanto en sabor como en el costo. Por lo que, en pocas palabras, mezcló un poco de cada tipo de whisky y creo el whiskey blend, que en español significa whisky mezclado.
Con la mezcla no solo obtuvo más clientes y un licor más económico con la misma calidad, también creó una revolución, ya que al poco tiempo muchas de las destilerías cercanas empezaban a repetir el producto según sus instintos. El proceso se repitió una y otra vez hasta la actualidad donde el whisky blend es uno de los más consumidos y económicos de mercado.
Algunas destilerías de Escocia, comenzaron a mezclar su whisky de malta mas joven y fuerte, con un whisky de grano suave, para obtener un producto de calidad aceptable y a un precio asequible. Es decir, tomaron distintos tipos de whiskies, los mezclaron para poder llegar a mas mercado.
La elaboración del whisky blend es mucho más complicada que el del resto de los whiskies. Este obligatoriamente debe llevar dos tipos de granos, comúnmente malta y la mezcla de otros, y por supuesto el nombre blend en su etiqueta para informar los ingredientes que contiene.
La creación del whisky blend inicia con la selección de los granos a procesar, es decir, seleccionando los granos comunes (como cebada maíz o trigo) y granos de malta (donde la germinación ya hizo efecto). Los segundos suelen ser entre 7 y 15 veces más que los primeros granos, todo dependiendo del tipo de whisky blend.
Luego de la selección, cada uno de los granos seleccionados debe ser molido y mezclado con abundante agua para fermentar y destilar. El proceso termina cuando el líquido obtenido se introduce en barriles de roble, durante por lo menos 3 años continuos. Aunque, de igual forma el whisky blend no indica la edad al momento de distribuirse.
Este tipo de whisky cuenta con muchos fabricantes hoy en día, los cuales se encuentran distribuidos por todo el mundo. Sin embargo, los principales se ubican en Escocia, el mayor productor de whisky blend hasta ahora.
El whisky single malt, whisky puro de malta o whisky escocés single malt como muchos otros lo conocen, es uno de los tipos de whiskies más complejos que fueron creados. Con muchas características propias e incomparables que a la mayoría de los escoceses y por supuesto demás fanáticos del whiskey les encanta.
Si tú eres un amante de los whiskies debes saber que el whisky single malt no solo puede ser tomado de forma tradicional, este suele ser utilizado para la creación de otros whiskies más suaves como el whisky blend. Sigue leyendo y te enterarás de muchas otras cosas relacionadas con el whisky single malt.
En Escocia, cada destileria de scotch whisky debe contar con su propio Single Malt como whisky base y representativo de la destileria. A partir de allí, los maestros que combinan los whiskies, compran los single malts de distintas destilerias, para hacer sus propios blended whisky personales
El sabor del whiskey single malt es bastante fuerte por el simple hecho de estár fabricado únicamente con cereales de malta. Así mismo es el que nos puede indicar que destilería o persona lo fabricó en su totalidad, pues, el whisky single malt tiene el peculiar detalle de tener una única receta dependiendo de la destilería de la que hablemos. Es decir, que ningún whisky single malt puede saber exactamente igual a otro.
Cosa que es buena y mala al mismo tiempo, porque con esto logramos una mayor diversidad de sabores y cada fábrica debe hacerse cargo de los ingredientes. Pero, al ser tantos los sabores que puedes encontrar en un whiskey single malt ¿Cómo puedes saber cuál es tu favorito? Un whiskey single malt puede ser desde muy amargo hasta muy dulce, es algo que no se define en ninguna regla sino lo decide cada fabricante.
Este tipo de whiskey, se elabora principalmente de cebada malteada. Tradicionalmente, es destilado en alambiques de cobre con forma de cebolla.
Dependiendo del origen de la malta, surgen diferentes denominaciones:
Es elaborado a partir de cebada sin maltear, maíz y otro tipo de cereales. Se suele destilar en alambique de destilación continua o columnas de destilación.
El whisky single malt no tiene un país de origen completamente confirmado, es otro tipo de whisky que queda entre la deriva de Escocia e Irlanda, dos países ampliamente conocidos por la fabricación de whiskies de gran calidad.
Suele atribuírsele a los escoceses, por lo que según la mayoría este se creó en una zona de Escocia donde residían los monjes y se encontraba un lago que a pocos metros tenía una gran extensión de cebada. De la cual, luego de la primera creación de whisky, se extrajo un primer whisky single malt producido únicamente con la malta de la cebada. Al ser un whisky tan potente y concentrado, durante algún tiempo era diluido con más agua.
La elaboración tradicional del whisky single malt, es decir, la elaboración con la que desde un principio se creó solo incluye tres ingredientes de mucha importancia. Entre los que se encuentran el agua, la levadura y la cebada, que es el ingrediente más importante de todos ya que dará todo el sabor posible al whisky single malt.
El primer paso para la elaboración es remojar la cebada hasta que la misma germine por completo y tenga raíces, para que los granos sean tostados. Luego, se deben moler y mezclar con agua caliente dichos granos para iniciar el proceso de fermentación. Lo siguiente será el proceso de destilación que debe repetirse dos veces antes de iniciar la fermentación final en un barril de roble durante 3 años como mínimo.
Si vamos a hablar de la elaboración del whiskey, tenemos que prestar atención a la materia prima. Podríamos decir que hay 2 tipos de whisky. Uno de ellos es de MALTA, o MALT, el cual se elabora a base de cebada malteada. El segundo tipo está hecho con granos o mezcla de granos, tales como centeno, trigo y cebada. Se denominan whiskies de GRANO o GRAIN. De estos 2 tipos que acabamos de describir brevemente, sale un tercer tipo de Whiskey, el MEZCLADO o BLEND, que es una mezcla de ambos.
Vamos a mostrar en unos 4 pasos, las distintas etapas de elaboración de whisky MALT, que es el mas representativo:
Se sumerge la cebada en agua y se extiende en la base de malteado con la finalidad de que se germine. Una vez que le han salido brotes, se seca dentro de hornos con ayuda de aire caliente. Este proceso dura aproximadamente 3 días, hasta que se alcance el nivel de tostado deseado.
Una vez que obtenemos la cebada molida, se mezcla con agua caliente en una cuba de maceración. El resultado, es un liquido azucarado al que se denomina: MOSTO. Este mosto, es la base para el alcohol.
El mosto líquido obtenido en el paso anterior, se traslada a unas cubas grandes llamadas tinajas o recipientes de fermentación. Se añade la levadura y se deja fermentar el líquido para que los azúcares del mosto se transformen en alcohol con una graduación del 8 %. El líquido resultante se conoce como “wash” o mosto fermentado.
El mosto fermentado se calienta en dos alambiques de cobre, el alambique de mosto y el alambique de licor. Solo se recoge la parte del licor con una calidad suprema y se vierte en barricas de roble para su envejecimiento. El whisky es reposado en distintos barriles de donde obtiene su caracteristico color y las notas de vainilla. El resto se extrae con sifón y se vuelve a destilar.
Ahora que ya conocemos como se elabora paso a paso, vamos a mostrar las peculiaridades de los whiskys mas conocidos:
El proceso de elaboración es similar al resto de los whiskies. Se seleccionan cereales, se realiza la mezcla propia de cada destilería y posteriormente se lavan y remojan para someterlo a su germinación. En este proceso, se transforma el almidón de los cereales en azucares solubles.
Luego, se muelen los granos, se realiza el empastado y se procese a la fermentación del liquido obtenido durante 72 horas aproximadamente. Al liquido obtenido, se lo destila 3 veces y se lo coloca en barriles de roble, para su añejamiento. Este periodo debe durar como mínimo 7 años.
La elaboración del whisky escoces, debe hacerse confirme a los estándares de la Orden del Whisky Escoces de 1990, el cual ordena que esta bebida espirituosa debe ser procesada en una destilería escocesa con agua y cebada malteada con un grado de 94,8° de alcohol por volumen. Debe añejarse en barricas de ROBLE que antes resguardaban bourbon con una capacidad no superior a 700 litros.
Este proceso debe realizarse en Escocia por un tiempo mínimo de 3 años. Muy importante a considerar, que no pueden agregar otras sustancias que no sean agua o caramelo. Y no pueden ser embotellados con menos de 40 grados de alcohol por volumen.
Estos tipos de whiskey no deben ser destilados a más de 80 % de alcohol por volumen y deben envejecer en barriles nuevos de roble carbonizados. A excepción del corn whiskey que no debe ser envejecido, pero de hacerse, se usarán nuevos o usados barriles de roble.
El envejecimiento del corn whiskey suele ser de algunos meses. Si el envejecimiento de estos tipos de whisky alcanza los dos años o más, al whisky le será adicionalmente designada el calificativo «straight», como por ejemplo straight rye Whiskey. Los Whiskeys estadounidenses mezclados combinan los «straight whiskey» con whiskies no envejecidos, además de sabores y colores.
No definido por la ley, pero muy importante en el mercado es el Tennessee whiskey, siendo Jack Daniel’s la marca más conocida. El método de destilación es idéntico al del bourbon en prácticamente todo, pero la diferencia más notable es que el Tennessee whiskey es filtrado en carbón de arce sacarino, dándole un sabor y aroma únicos.
El sistema de elaboración es prácticamente idéntico al de los escoceses, el whiskey de malta se destila 2 veces, se añeja en barricas de roble y se lo deja reposar.
Para nosotros, lo que hicieron los japoneses, fue tomar el proceso de elaboración de Escocia, mejorarlo y presentarlo al mundo. Como básicamente hacen con todo, toman ideas generadas y las mejoran.
En los ultimos años han ganado un gran respeto en el mundo del whisky. Incluso han adquirido premios del MEJOR WHISKY DEL MUNDO.
